Ha sido muy decepcionante, a decir verdad. Había supuesto que la euforia desatada por la inmediata investidura de Barak Obama como Presidente de los Estados Unidos de América, el primer presidente negro, sería ampliamente compartida por el colectivo “negros”. Pues no.
Con el objetivo de confirmar la hipótesis inicial: “júbilo de los negros ante la promoción a la Casa Blanca de un negro”, decidí recurrir a alguna entidad solvente que realizara un trabajo de campo ajustado a mis necesidades. Después de comprobar lo costoso que resulta contratar una empresa de las que salen en las Páginas Amarillas, decidí rebajar mis pretensiones y recurrir de nuevo a Eljavi.
Hubo suerte, porque Eljavi tiene una amiga que trabaja en cierta ONG en no sé qué país subsahariano. Además él mismo frecuenta los bares de Lavapiés, barrio multicultural por excelencia. De este modo dispondríamos de una muestra suficientemente representativa del colectivo que necesitábamos prospeccionar (¿se dice así, no?).
La Adelita, que es como se llama la cooperante voluntariosa consultada, nos trasmitió sus datos desde un cibercafé de la capital. De su conversación con un grupo de estibadores locales auténticamente negros, da cuenta en estos términos:
- Ahora los americanos van a tener un presidente negro. ¿Qué les parece a ustedes?
- Bueno… Nosotros también tenemos un presidente negro, ¿Y qué? ¡Vaya mérito!
- Pues que seguramente las cosas van a ir mejor, ¿o no?
- ¡Uf! Como ese presidente negro sea como el nuestro, van lucidos. El nuestro es un hijo de puta, más ladrón que caco. No les arriendo la ganancia.
- Pero, ¿ustedes saben algo de los Estados Unidos?
- Son los de la Cocacola, ¿no? Una tribu bastante fuerte, que mata a muchos enemigos, creo…
Decepcionante, en verdad.
La siguiente fase de la prospección se efectuó en el barrio de Lavapiés, importante núcleo interétnico al que se encaminó Eljavi provisto de una foto de Barak Obama, que mostró a un grupo de negros apostados en la esquina de Jesús y María con San Carlos.
- ¡No conocemos de nada a ese tipo! ¡Nosotros no hemos hecho nada, estamos limpios, tío!
- Pero mírenlo bien, hombre.
- Te digo que no, colega. Yo antes estaba en la construcción, pero nos echaron a todos y de algo tengo que comer, ¿vale?
- Está bien, pásame algo, por lo menos.
- Vale. Oye, bien mirado se parece a uno que lleva el locutorio de ahí abajo, pero viste más chulo.
Eljavi me llamó de inmediato para informarme sobre los resultados de la encuesta.
- Si quieres, puedo probar en el Maresme y en los invernaderos de Almería. Tengo contactos por allí.
- Déjalo…
No hay comentarios:
Publicar un comentario